
26 Jun A los 93 años murió el compositor argentino Lalo Schifrin, autor de la música de “Misión Imposible”
. El artista consolidó una carrera internacional que lo colocó entre los músicos más destacados del cine y la televisión. La noticia fue confirmada por el sitio estadounidense Variety

El músico y compositor argentino Lalo Schifrin murió a los 93 años en Los Ángeles, Estados Unidos, según confirmó el sitio estadounidense Variety.El fallecimiento ocurrió este jueves, cerrando una extensa y exitosa trayectoria artística reconocida a nivel mundial. La causa fue una neumonía que lo mantuvo internado y derivó en complicaciones fatales.
La noticia de su fallecimiento impactó tanto en Argentina como en la escena internacional, donde el nombre de Schifrin quedó vinculado de manera indeleble a la historia de la música moderna. La muerte del compositor representa la pérdida de una de las figuras más relevantes de la composición argentina y universal.

Apenas dos meses antes de su fallecimiento, estrenó una nueva obra en el Palacio Libertad, acompañado por Rod Schejtman, reconocido compositor y pianista conocido por sus fusiones de música clásica sinfónica con bandas sonoras de películas. La sinfonía, titulada “¡Viva la Libertad!”, contó con la interpretación de la Orquesta Sinfónica Nacional bajo la dirección del maestro Emmanuel Siffert.
El artista consolidó una carrera internacional que lo colocó entre los compositores más destacados del cine y la televisión. Uno de sus mayores legados fue la creación del tema principal de Misión: Imposible, cuya melodía distintiva con ritmo sincopado se convirtió en un símbolo de la serie y, posteriormente, de la franquicia cinematográfica. Además de este hito, Schifrin firmó la música de otros grandes títulos como “Harry el sucio”, “Bullitt”, “The Cincinnati Kid”, “Mannix”, “Starsky y Hutch” y “Tango”, de Saura.
).Su época dorada se ubicó entre las décadas de 1960 y 1970, periodo en el que su capacidad para fusionar géneros y estilos lo catapultó a la fama tanto en Hollywood como en el ámbito televisivo estadounidense. Las bandas sonoras de Schifrin aportaron identidad y carácter a obras que hoy son consideradas clásicos, confirmando su influencia en la industria del entretenimiento.

Con una propuesta musical que alternaba la música clásica sinfónica, el jazz y elementos de la música popular, Schifrin logró que muchas de sus composiciones trascendieran la pantalla y permanecieran en el imaginario colectivo. Esa creatividad se extendió también a la música de cámara y la música sinfónica, áreas en las que incursionó paralelamente a su labor en la industria audiovisual.
A lo largo de su carrera, Lalo Schifrin acumuló un extenso listado de premios y distinciones que reflejan su influencia global. En Estados Unidos, su nombre está grabado en una estrella del Paseo de la Fama de Hollywood, un símbolo del reconocimiento de la industria del entretenimiento estadounidense. Schifrin fue también galardonado con cuatro premios Grammy y recibió el prestigioso Premio Max Steiner, que distingue la excelencia en composición de música para cine.
Su talento fue contemplado en numerosas ocasiones por la Academia del Cine de Hollywood, que lo nominaron varias veces a los premios Oscar. Finalmente, en 2019, Schifrin obtuvo un Oscar honorario que le fue entregado por el actor y director Clint Eastwood, con quien mantuvo colaboraciones relevantes a lo largo de su trayectoria. Este galardón representó la consagración oficial de una carrera dedicada a crear universos sonoros para el séptimo arte.